MUNICIPIOS

Romina Contreras encabeza adhesión de DIFs municipales a la declaración de Venecia para fortalecer a las familias de México

QUERÉTARO, Querétaro.- Durante el Segundo Encuentro Político de la Red Nacional de DIF Municipales, la presidenta de esta organización, Romina Contreras de Vargas, firmó un convenio de colaboración con el Instituto de Análisis de Política Familiar (IAPF), con el objetivo de que los Sistemas Municipales para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) se adhieran a la Declaración de Venecia, para que emprendan acciones y esfuerzos comunes en materia de vivienda, nuevas tecnologías, educación, salud, seguridad y medio ambiente, entre otros temas, para consolidar las Ciudades Familiarmente Sostenibles.

En el Teatro Experimental de Querétaro, donde estuvo acompañada del secretario general adjunto de la Conferencia Nacional de Municipios de México (CONAMM) y secretario Ejecutivo de la Asociación Nacional de Alcaldes (ANAC), Adán Larracilla Márquez, de la vicepresidenta de la Red Nacional y presidenta del Patronato del DIF Querétaro, Arahí Domínguez de Nava, y de presidentas y directoras de DIFs Municipales de todo el país; Romina Contreras resaltó la importancia de que los organismos asistenciales se sumen a este esfuerzo iniciado por la Federación Internacional para el Desarrollo de la Familia (IFFD, por sus siglas en inglés), con el propósito de iniciar programas transversales basados en la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que permitan el fortalecimiento de las familias como una institución y como agentes de desarrollo cruciales para generar ambientes adecuados que faciliten el progreso de México.

Resaltó que, a través de su incorporación a la Convención de Venecia, los Sistemas Municipales DIF establecen el compromiso de sus ciudades para que en el diseño y planeación de viviendas, los gobiernos locales contemplen todas las situaciones de las familias y grupos sociales, incluyendo monoparentales, numerosas o en condiciones migratorias, entre otras, y brindarles los servicios sociales necesarios para atender sus necesidades; además, conectar a la gente a través de las nuevas tecnologías para garantizar su inclusión social y reducir la brecha digital, por medio de la capacitación a los grupos más vulnerables.

Los municipios también se comprometen a generar una educación inclusiva y de calidad, a promover el aprendizaje mediante el mejoramiento de las instalaciones destinadas para este fin, con la ubicación de los espacios educativos en sitios cercanos a las residencias de los grupos vulnerables o a los lugares de trabajo de los padres, así como a la realización de prácticas de integración para jóvenes y a la creación de escuelas de segunda oportunidad.

Romina Contreras explicó que, con el acuerdo, los DIF´s municipales también generarán campañas para promover hábitos y estilos de vida saludables, especialmente, aquellos enfocados a prevenir desórdenes mentales y a satisfacer la alimentación de las personas de la tercera edad, al tiempo en que se promovería la creación de ambientes seguros, por medio del regreso de la sociedad a las calles bajo esquemas de solidaridad, apoyo mutuo y de interacción social, con instrumentos como la incorporación de voluntarios y policías comunitarias, entre otras.

En materia ambiental, la Convención de Venecia establece la posibilidad de generar tantas áreas verdes como sea posible y otorgar estímulos fiscales para construcciones verdes y la reducción progresiva de la contaminación generada por el transporte público en estos municipios, el cual debe avanzar en la ruta para ser racional y accesible; al tiempo en que se aumentan los puntos de recarga para los vehículos eléctricos, se promueve la economía circular y el teletrabajo, y se valora la labor en el hogar y el cuidado no remunerado.

La presidenta de la Red Nacional de DIF Municipales agregó que también se estipula la posibilidad de hacer planificaciones en estas localidades para facilitar el acceso a la vivienda a familias vulnerables, incluyendo a los jóvenes, personas con discapacidad y adultos mayores, y la promoción de modalidades de convivencia intergeneracionales inteligentes con servicios compartidos, el ahorro de energía eficiente y la edificación de construcciones flexibles, además de emprender acciones para conservar y restaurar el turismo de las ciudades, entre las que se incluyen la generación de programas para facilitar el acceso a estas actividades de tipo cultural con precios especiales.

Al respecto, el director general del IAPF, Juan Antonio López Baljarg, recalcó que los organismos asistenciales como lo son los DIF´s municipales deben cambiar su visión asistencialista por la implementación de una política familiar que permita el desarrollo sostenible y que reconozca a las familias como un agente de desarrollo y un aliado de los gobiernos en la construcción de Ciudades Familiarmente Sostenibles.

Aseveró que, a partir del interés que han mostrado los municipios para avanzar en este modelo de política, se debe privilegiar la realización de un diagnóstico que permita conocer realmente la dinámica familiar en México e identificar la situación actual de los hogares mexicanos, a fin de impulsar programas y adecuar estructuras de gobierno para fortalecer los hogares y a sus integrantes, por medio de una labor transversal en la que participen todos los sectores involucrados en esta tarea.

Durante el Segundo Encuentro Político, los participantes, en voz del secretario general adjunto de la CONAMM y secretario Ejecutivo de la ANAC, Adán Larracilla Márquez, reiteraron el llamado de estos organismos asistenciales para que se abandone cualquier intento de desaparecerlos y, en su lugar, se hagan esfuerzos para fortalecerlos y dotarles de mayores facultades, para que, junto con cámaras empresariales y organizaciones de la sociedad civil, se diseñen programas conjuntos que permitan fortalecer a las familias.

En esta ocasión, los Sistemas Municipales DIF compartieron experiencias exitosas encaminadas a la atención de la violencia contra los niños, niñas y adolescentes, pues se estima que 50 por ciento de quienes integran a este sector de la población en el mundo han sufrido algún tipo de agresión física, psicológica o sexual, y tres de cada cinco menores reconocen que sus victimarios pertenecen a su propio núcleo familiar o cercano, además de retroalimentarse para la conformación de centros integrales para la atención de los grupos vulnerables y de los Institutos Municipales para las Familias, entre otros casos ejemplares.