***Columna ENTRE LÍNEAS: Diputados se olvidan de Juárez

***Columna ENTRE LÍNEAS: Diputados se olvidan de Juárez

De dar vergüenza es que la mayoría de los legisladores del Congreso del Estado de México, se engañen a sí mismos y crean que engañan a los ciudadanos, al justificar los sueldazos de los presidentes municipales, pecando además de ingenuos al considerar que con el tabulador del Consejo Consultivo de Valoración Salarial, el establecer un tope salarial evitará que los alcaldes se despachen con la cuchara grande.

Una vez más, en el Congreso Mexiquense creen que todo lo hacen bien, al fin que el pueblo ni reclama, pero la realidad es que estas acciones hablan de que los diputados le juegan por un lado al cómplice con los ediles, al poner un tabulador que les permite “legítimamente” poder devengar sueldos estratosféricos.

Ypor otro, no son capaces de legislar para que se sancione a quienes hacen de los ayuntamientos su mina de oro personal.

Viendo los datos concretos, resulta que la Legislatura ha establecido como máximo un sueldo de 167 mil 546 pesos al mes y ha diseñado cinco categorías salariales, todo ello, sin cuestionar que para los contribuyentes es una falta de respeto que mientras muchos de éstos se privan de paseos o diversiones con tal de pagar sus impuestos, avalen que los alcaldes piensen que es correcto lo que ganan, porque “así trabajan por sus gobernados”.

Según esto, el tabulador debe estar en armonía a una valoración que es bien discutible: el índice de responsabilidad, por la eficiencia en la prestación de servicios, grado de marginalidad que hay en sus municipios, presupuesto, número de habitantes.

Entonces así las cosas, hay que justificarle al alcalde de Ecatepec, el municipio con más población del país, que pueda ganar 167 mil pesos al mes, cuando al mismo tamaño de su situación demográfica, es el de los problemas de esa demarcación, azotada por la delincuencia, la carencia de servicios básicos, falta de agua potable, el alto grado de pobreza que existe en algunas colonias y la opacidad en la información sobre el manejo de los recursos públicos. Nada más erróneo.

Para otros municipios, el tope salarial llega a un máximo de 130 mil pesos al mes, hablando de Nezahualcóyotl, Naucalpan, Tlalnepantla, Toluca, Atizapán, Metepec, Chimalhuacán y Cuautitlán Izcalli, mientras en los municipios de tipo rural no podrían rebasar los 64 mil 704 pesos al mes.

Es evidente que los diputados del Edoméx no hicieron ninguna consideración que tenga que ver con el concepto de austeridad republicana, qué acaso el alcalde de Ecatepec Indalecio Ríos es una especie de Tlatoani, que no podría subsistir por ejemplo con un máximo de 50 mil pesos al mes, es pregunta.

Y así como ese caso, tantos otros alcaldes que podrán respetar el “tope” salarial, pero si no se les pega la gana, quién va a sancionarlos si el Consejo Consultivo de Valoración Salarial sólo emite recomendaciones, porque es celoso guardián del 115 Constitucional.

Además, para nadie es un secreto que los alcaldes suelen disponer de una “nómina confidencial,” que manejan a su libre albedrío y que con ella, lo mismo se auto premian, que pueden dar bonos a sus consentidos en los ayuntamientos. Entonces, el problema es que no existen mecanismos de control en lo absoluto.

A qué terminamos llegando con todo esto, más que al punto de partida, porque el “tabulador” puede o no ser respetado por los presidentes municipales y no va a pasar nada.

Eso sí, que no pregunte Juan Pueblo por todo aquello que no se ha hecho en su municipio. Qué lástima, pensaron en muchos criterios para los sueldos de los presidentes, pero se olvidaron de un hermoso y sencillo principio enunciado por Juárez: que los funcionarios vivan en una honrosa medianía.

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Preservar el entorno ecológico es un tema fundamental para cualquier gobierno, sobre todo considerando el deterioro que registran las zonas urbanas en los municipios conurbados a la capital del país, donde lo mismo hay problemas por las emisiones de contaminantes provenientes de los vehículos, que de las industrias.

Por ello, en Tlalnepantla de Baz, uno de las demarcaciones más importantes del país y con una relevante zona fabril, la alcaldesa Denisse Ugalde ha instruido al titular de Medio Ambiente Desiderio Torres Barrón, para contribuir al esfuerzo para que los ciudadanos vivan en una demarcación en la que se tenga plena conciencia de preservar los ecosistemas.

El área de Medio Ambiente del gobierno de la tierra de en medio a través de su director, ha emprendido una auténtica cruzada ambientalista, mediante la realización de diversos talleres y conferencias, en los que los participantes reciben capacitación de parte de especialistas en este tema, para cuestiones como el reciclaje,  así como azoteas verdes, esto durante una serie de eventos en cuatro sesiones, una por semana.

Y es que el momento es clave, ya que sembrar la semilla de la conciencia ambiental y dar herramientas a la gente para que sepa cómo mejorar su entorno, resulta fundamental para un municipio como Tlalnepantla, que es uno de los que más empuje tienen a nivel comercial, industrial y de servicios en la entidad y por lo tanto, requiere de mantener un sano equilibrio entre su desarrollo económico y la ecología.

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